Felices Bodas de Plata, Parroquia San Joaquín y Santa Ana

 

    El pasado 26 de julio, mi parroquia alcanzó un hito muy significativo en su historia, llegar a sus primeros 25 años de vida parroquial, situación que se procuró celebrar con el mayor decoro y sentido devocional. 

    Se realizó la novena a los patronos, se contó con la presencia de algunos presbíteros que han acompañado a la comunidad, tuvimos un concierto de música religiosa, una viejoteca, uno de nuestros célebres bazares y hasta contamos con la presencia del señor arzobispo de Medellín, monseñor Ricardo Tobón en una Eucaristía Solemne, llena de júbilo y piedad.

    La historia de la parroquia se remonta al año 1994, donde un grupo de personas del sector de Quintalinda, que para la época se encontraba en construcción y contando con sus primeros habitantes, se esmeraron por con una comunidad eclesial para el sector, siendo sus primeros dinamizadores el entonces Diácono José Onofre Flores y el párroco de la Parroquia Nuestra Señora del Santísimo Sacramento, Jairo Rafael Gómez, además de tener los permisos correspondientes de  Monseñor Héctor Rueda y  Monseñor Darío Monsalve Mejía, lo que permitió que la comunidad comenzara a crecer no solo en lo material sino en lo espiritual.

    En otra de mis letras, les conté que yo llegué a mi barrio en 1997, y casi al mismo tiempo de mi llegada, empecé a vincularme con la vida parroquial, a la cual luego se vinculó Astrid hasta su partida, y después, mi amada esposa Doris también decidió aventurarse en este caminar.

    Tengo el récord parroquial de ser el cantor litúrgico más longevo en la comunidad, fui formador de coros, he visto pasar grupos por montones, acompañado infinidad de ceremonias, viendo cómo la parroquia poco a poco ha ido creciendo, gracias al empuje de sus párrocos y de quienes hemos querido hacer parte de esta experiencia, que no siempre ha sido fácil, porque no han faltado las envidias, discordias y situaciones difíciles, porque en ultimadas cuentas, esta comunidad está conformada por personas que tenemos temperamentos muy disimiles, y no siempre vamos a estar de acuerdo en todo, pero algo que nos ha permitido lograr estos 25 años, es precisamente nuestro anhelo e interés de crecer a la par de las enseñanzas de Jesús, procurando vivir en fraternidad y generosidad.

    Así las cosas, en el año 1999 se bendijo la primera piedra y en 2000 se expidió el Decreto Eclesiástico que cristalizaba por fin la existencia de la nueva parroquia, aún en sus primeras obras, mismas que se llevaron a cabo tocando un sinfín de puertas y llevando a cabo un montón de actividades para hacernos con los recursos para su construcción.

    Hoy por hoy, la comunidad cuenta con un Templo Parroquial muy bonito, con varios espacios para la vida comunitaria y espiritual, con un alto número de servidores comprometidos en su servicio a través de diferentes grupos pastorales y una feligresía que permanece fiel, con anhelo de cambio y transformación en sus vidas para la gloria de Dios.

    Por la parroquia han pasado muchos sacerdotes, seminaristas, gentes que han pertenecido a diferentes grupos, que cumplieron su labor y se han ido a servir en otras partes, pero que, sin duda, han dejado una huella perdurable en la historia parroquial.

    Doy gracias a Dios por haberme permitido celebrar este acontecimiento en compañía de mis hermanos y por permitirme servir durante tantos años y si es Su voluntad, espero poder seguir haciéndolo otro tiempito más. Feliz cumpleaños, parroquia San Joaquín y Santa Ana.